Previsión meteorológica para Móstoles.

lunes, 30 de diciembre de 2019

Aparición de una masa de agua cálida en el Pacífico sur.

El océano sigue siendo un gran desconocido respecto a su funcionamiento y su variabilidad natural, una enorme masa de agua que alberga una cantidad de energía ingente y que tiene un papel crucial en el balance radiativo del planeta debido a los flujos de calor latente y calor sensible que genera. Presenta tres escalas fundamentales de variabilidad:
-la del corto plazo, de semanas o pocos meses y detrás de la cual está la variabilidad atmosférica asociada a la escala sinóptica.
-la del medio plazo, de unos meses a años, asociadas a ondas de gravedad como las ondas Kelvin, desarrolladas dentro del océano debido a la rotación del planeta.
-la del largo plazo, de lustros o decenios de duración, asociadas a cambios en la circulación termohalina, influenciada en parte por los ciclos solares, orbitales, etc y muchos de los cuales aun no sabemos ni su origen ni periodo.

En el último mes ha aparecido un fenómeno de variabilidad de corto plazo, y es la formación de una masa de agua caliente en el Pacífico sur. Debido al poco tiempo que ha tardado en formarse, es lógico pensar que la variabilidad atmosférica a escala sinóptica esté detrás de ella. Y parece que así ha sido.
Empecemos por ver como han evolucionado las anomalías de la temperatura del agua del mar a lo largo de este mes de diciembre, prestando atención al Pacífico sur.






                      figura 1 a 8 :anomalías de la temperatura del agua del mar a lo largo del mes de diciembre.

 Se puede observar perfectamente como se ha formado esa gran zona de aguas más cálidas de lo normal al este de Nueva Zelanda a lo largo del mes; con anomalías de hasta +5ºC; y como según esta ha ido formándose, se ha reforzado la fría que tiene a su derecha y que lleva más tiempo en esa zona.
Pero ¿qué ha pasado este mes para que se hayan dado las condiciones que han dado lugar a la aparición de esa masa de agua más caliente de lo normal?
Las anomalías de temperatura no están restringidas al agua del mar, también a la temperatura del aire en superficie (figura 9) y ambas coinciden. Las anomalías de temperatura de la superficie del mar son los suficientemente extensas como para afectar también al aire que subyace sobre ella,en una atmósfera en general estable como veremos ahora.
 figura 9 :anomalía de la temperatura en superficie desde el 10 al 26 de diciembre de 2019.


En la zona, además, ha sido un mes de diciembre con una atmósfera estable con un potente centro de altas presiones (figura 10) que ha favorecido condiciones de poco viento en su centro, que en la época del año de mayor radiación solar en la zona, ha provocado un aumento de la temperatura superficial del océano. Mientras,en los bordes de esa zona de altas presiones ha habido intensos vientos del sur y del norte.
 figura 10: presión media a nivel del mar desde el 10 al 26 de diciembre de 2019.


Esa zona de altas presiones ha sido anormalmente estacionaria y potente, apareciendo;como se ve en la figura 11; anomalías de presión de más de 8 e incluso 10hPa, mientras que al oeste aparecen anomalías negativas. Se ve claramente como las anomalías cálidas de temperatura del agua del mar están al oeste de la zona de altas presiones y las frías al este. 
 figura 11 : anomalía de la presión media a nivel del mar desde el 10 al 26 de diciembre de 2019.


Ese centro de altas presiones ha canalizado por su lado izquierdo aire cálido procedente desde el norte (recordemos que en el hemisferio sur el viento en los anticiclones gira en sentido antihorario), mientras que por el lado derecho ha canalizado aire frío procedente de la Antártida,lo que se ve en la figura 11 que representa el viento medio a nivel de la superficie. Ese movimiento de masas de aire no ha sido simétrico, siendo la advección de aire cálido más fuerte que la de aire frío, lo que explica el crecimiento rápido de esa burbuja de agua más cálida de lo normal pero también el ligero reforzamiento también de la fría que existía antes.
 figura 12 : vector viento medio en superficie desde el 10 al 26 de diciembre de 2019.


La persistencia de esa zona de altas presiones ha favorecido ese transporte meridional de calor, mientras que el movimiento zonal ha estado por debajo de lo normal, como muestran las anomalías del viento zonal que aparecen en la figura 13 y que señalan en color morado las zonas donde el viento zonal ha sido más débil de lo normal,zona que coincide con esos máximos de vientos del norte que nos mostraba la figura 12.
figura 13: anomalía del viento zonal en superficie desde el 10 al 26 de diciembre de 2019.



Si observamos ahora las anomalías del viento meridional de la figura 14 podemos observar como aparece una gran zona de anomalías negativas (intensos vientos del norte) al este de Nueva Zelanda, justo en la zona donde la figura 12 mostraba esa gran advección de vientos de norte, mientras,al este, aparecen anomalías positivas del viento meridional (vientos del sur también más fuertes de lo normal), aunque con intensidades menores en valor absoluto que las negativas y que son los que han reforzado esas aguas frías que ya había anteriormente.
                                  figura 14 : anomalía del viento zonal en superficie desde el 10 al 26 de diciembre de 2019.


Así pues, nos encontramos ante la formación de una burbuja de agua caliente en el Pacífico sur como consecuencia de la presencia de una zona de altas presiones más fuerte de lo normal por cuyo borde izquierdo se ha canalizado una advección de vientos del norte que ha traído aire más templado y también aguas más cálidas procedentes de la zona subtropical del Pacífico. Por contra, por el lado derecho de la esa zona de altas presiones, lo que se han canalizado han sido vientos del sur, no tan intensos como los del norte pero si lo suficientes como para conseguir mover aire y aguas más frías procedentes de la periferia antártica y que han reforzado la anomalía fría del agua del mar que había con anterioridad en esa zona. Todo esto ha sucedido en menos de un mes, simplemente por la persistencia de una determinada situación atmosférica. Los cambios a escalas de tiempo mayores probablemente no sean tan fuertes pero afectan a regiones aun más extensas de ahí su importancia mayor. Iremos viendo como va evolucionando dicha anomalía cálida en las próximas semanas. 
Como curiosidad, quiero también que os fijéis en la costa atlántica en torno al ecuador en África. Podéis ver una gran zona de aguas más cálidas de lo normal: es un Niño Atlántico, también los hay en este océano y un día os escribiré una entrada sobre este fenómeno pues parece que los Niños atlánticos preceden a los del Pacífico.